Las nalcas (Gunnera tinctoria) están presentes en la tierra desde hace unos 90 millones de años conviviendo por tanto con los dinosaurios, como su extravagante porte y estructura nos sugieren.
Las protuberancias que vemos en su tallo nos hablan de antiguas estrategias de defensa frente a animales que pudieron haberla consumido.
Las nalcas tienen la capacidad de “autoalimentarse” fijando nitrógeno a través de simbiosis o cooperación con cianobacterias (algo muy poco común), pudiendo colonizar lugares muy pobres en nutrientes y, a la vez, enriquecer el suelo para la colonización de otras especies.
El proceso
Esta fotografía, tomada en el Parque Nacional de Chiloé (sector Cucao), se realizó con técnica macro para acercarnos y ver con detalle esta sorprendente estructura del tronco de la nalca.
Se colocó la cámara sobre un plato micrométrico para poder ajustar el enfoque de manera precisa.
Se usó un filtro polarizador para aumentar el contraste y saturar los colores, además de la técnica del sombreado para controlar el contraste e intensidad de la luz y matizar las texturas.
Técnica macro: Tubo de extensión de 12 mm + duplicador 2x.
Distancia focal: 58 mm (Lente Helios).
Velocidad de obturación: 1/4 seg.; Diafragma: f/16; ISO 160.
